El embellecimiento peri ocular es cada vez más frecuente. Técnicas tanto invasivas (quirúrgicas) como no invasivas se complementan de manera sutil para otorgarle al paciente la mejor opción. Es tanto el boom del rejuvenecimiento peri ocular, que por ejemplo, por reportes de la American Society of Plastic Surgeons (ASPS) se realizaron 200.000 cirugías de párpados el 2016 en USA (sin contar esto con todos los procedimientos no invasivos que probablemente sean muchísimos más)

En general cuando uno recibe un paciente que busca el rejuvenecimiento peri ocular, este se queja de una serie de defectos que hacen relación con los siguientes aspectos que debemos analizar para una terapéutica ideal:
- Apariencia de cansancio
- Párpados pesados o prominentes
- Caída de la ceja lateral con hooding
- Bolsas palpebrales
- Surco nasoyugal marcado (surco de la nariz al labio)
- Hipoplasia de pómulos (malar)
- Exceso cutáneo, arrugas
Muchas de estas características pueden ser eficazmente abordados por procedimientos no invasivos, aunque algunos son más amenos a ser resueltos quirúrgicamente.
Frente a un paciente que quiere realizarse un rejuvenecimiento peri ocular lo primero que debemos hacer es ver qué es lo que busca o qué le molesta respecto a su zona peri ocular. Luego de definir bien esto, que podemos dividirlo en los puntos antes descritos, podemos realizar un plan escalonado de asesoramiento respecto a las técnicas que podrían darle corrección parcial o total a los problemas que el paciente busca dentro de los cuales tenemos herramientas no invasivas como cirugía (por ejemplo una hipoplasia malar o un surco marcado es manejable del punto de vista no invasivo, pero una ptosis palpebral real requiere de cirugía y viceversa.)
Una vez definido el problema del paciente a tratar debemos entender cuál es la anatomía y fisiopatología o causa que generó dicho defecto. Se sabe actualmente que todas las capas de la cara desde la piel al hueso están involucradas en el envejecimiento facial. En la zona peri ocular esto no es distinto, sino más bien debe ser una de las zonas mas ejemplificadoras de los fenómenos complejos del envejecimiento facial. Ya teniendo un plan anatómico podemos elegir distintas técnicas involucradas en restablecer este envejecimiento desde rellenos de alta densidad para dar volumen a zonas óseas y compartimientos grasos disminuidos llegando hasta rellenos muy suaves para el manejo de estructuras más superficiales (por ejemplo surco nasoyugal). También tenemos el manejo de la piel con técnicas de láser, peeling, entre otras.
Finalmente una vez que decidamos las técnicas a utilizar siempre debemos tener como punto importante las complicaciones potenciales de un área compleja como es la peri ocular desde el sistema vascular rico hasta pieles de unidades estéticas adyacentes completamente distintas (piel párpado vs malar), pasando por un importante heterogeneidad en tipos de piel, laxitud, conformación de compartimientos y estructura ósea subyacente.
Finalmente las técnicas no invasivas tienen indicaciones precisas que podemos dividirlas en:
- Estructura anatómica a tratar
- Piel
- Compartimiento graso
- Óseo
- Problema a tratar
- Arrugas estáticas o dinámicas
- Ptosis de estructuras
- Hipoplasia
- Mal posición
- Laxitud
- Pigmentación
Frente a todos estos problemas tenemos técnicas no invasivas como
- Peeling
- Láser
- Roller
- Rellenos (más seguro ácido hialurónico por tener “antídoto”)
- Toxina botulínica
- Cosmecéuticos
- Radiofrecuencia